viernes, 30 de noviembre de 2012

Cavilaciones sobre Coseriu


La poesía es el lenguaje, darle un uso determinado es instrumentalizarla: describir, señalar, pedir, comentar, explicar, son pequeñas mutilaciones al absoluto poético. El esfuerzo se hace al no escribir-hablar poesía. (Hay quien hace mucho esfuerzo y no lo nota). La metáfora no es un alarde, es una naturaleza -un proceso semejante a la fotosíntesis, o a las combinaciones de las líneas del metro-, es la forma en la que ocurren los procesos en nuestra cabeza, en una acepción previa al habla. Y quisiera decir otras cosas, pero no vale la pena no lo haré.



Ahora, el silencio, lector maldito terrible: que hace parte de sí el texto, que lo llena de significado, de cultura, de carne, de tiempo. Dejémonos caer mejor, ante la horizontalidad de la palabra -cual andamio- y escapemos de la burda estúpida danza de las verdades.